Estudios anteriores han demostrado que los EDC alteran el funcionamiento normal de las hormonas sexuales en los seres humanos.
Un nuevo estudio ha encontrado altos niveles de sustancias químicas conocidas como disruptores endocrinos (EDC) en muestras de agua obtenidas en sitios del estado de Colorado donde se utiliza la fracturación hidráulica (fracking) para extraer petróleo y gas.
Estudios previos han demostrado que los EDCs alteran el funcionamiento normal de las hormonas sexuales en los seres humanos. Se han relacionado con el cáncer, la infertilidad y la alteración de la función reproductiva normal en hombres y mujeres, defectos de nacimiento, deterioro de la función inmunológica y neuronal y varios otros problemas de salud en los seres humanos. Los investigadores han descubierto que los fetos, los bebés y los niños pequeños expuestos a los EDCs tienen un mayor riesgo de sufrir enfermedades relacionadas con el mal funcionamiento endocrino.
Según el estudio publicado recientemente por la revista Endocrinology, se encontraron altos niveles de EDCs en muestras de aguas superficiales y subterráneas recogidas en el condado de Garfield, Colorado, una importante zona de desarrollo de petróleo y gas con más de 10.000 pozos donde se practica el fracking.
Los investigadores recogieron muestras de agua en cinco lugares de fracturación hidráulica en el condado de Garfield donde se sabía que se habían producido derrames en los últimos seis años. Analizaron las muestras en busca de diferentes tipos de EDC y descubrieron que "de las 39 muestras de agua únicas, el 89 por ciento, el 41 por ciento, el 12 por ciento y el 46 por ciento exhibieron actividades estrogénicas, antiestrogénicas, androgénicas y antiandrogénicas, respectivamente".
El estudio encontró que las muestras de agua recolectadas del Río Colorado también tenían niveles significativamente altos de EDC.
El río Colorado, que es la principal cuenca hidrográfica de la región, recibe los vertidos de aguas residuales del fracking que se producen en los pozos de gas natural de la región. Cabe destacar que los investigadores descubrieron que el agua recogida en lugares con poca o ninguna actividad de fracking en el condado de Garfield y Missouri tenía niveles mucho más bajos de disruptores endocrinos. El diario Los Angeles Times informa que Susan Nagel, endocrinóloga de la Facultad de Medicina de la Universidad de Missouri y autora principal del estudio, dijo: "Con el aumento del fracking, las poblaciones pueden enfrentarse a mayores riesgos para la salud debido a una mayor exposición a sustancias químicas disruptoras endocrinas".
No es la primera vez que los investigadores han expresado su preocupación por los productos químicos utilizados en el fracking que se sabe o se sospecha que son disruptores endocrinos. Según Los Angeles Times , los investigadores han identificado alrededor de 100 de estos productos químicos utilizados en el fracking.
